Una bestia creativa hasta la médula adicta a los retos y la ciencia ficción, esta es Virginia Mosquera, Directora Creativa en McCann Madrid. 

23 años en la profesión, 7 agencias, 3 libros, 2 hijos, infinitos festivales y profesional del ukelele en su ventana. Este es el palmarés de la escritora, guionista y creativa publicitaria que, entre otras cosas, prefiere lo imposible y persigue sus sueños aunque se choque contra la pared. 

Virginia nos cuenta sin pelos en la lengua tanto lo fascinante de la industria creativa como las trabas que ha superado para llegar donde está. 

La gurú del storytelling y el “guilty pleasure” creativo

La agencia la sangre altera, o al menos, es el caso de McCann. De padre y madre creativos en esta multinacional, surge Virginia cuyo ADN le pide creatividad y volver al lugar donde trabajaron sus padres para convertirse en Directora Creativa. 

Virginia asegura que siente la necesidad de contar y consumir historias para seguir viva. Esta necesidad de expresión la ha llevado a donde está, un puesto de liderazgo donde el contacto con la creatividad es su pan de cada día. 

Y en lo que se refiere a creatividad, el proceso creativo es donde la creadora más disfruta. Desde el “qué hacemos con esto” a la idea final con presentación y rodaje incluídos, Virginia confiesa que llevar a un cliente a terreno creativamente desconocido es uno de sus guilty pleasures.  

De hecho, esto es lo que ocurrió en su último spot para Coca-cola, dónde tanto ella, como su equipo y cliente, fueron atrevidos y llegaron a una idea innovadora y muy muy creativa. 

Cliché pero cierto: sobre-demostrar tu talento para llegar a la cúspide

Llegar a lo más alto no ha sido cosa fácil y más siendo mujer. Romper techos de cristales a base de demostrar su talento por dos: “he visto como compañeros míos subían sin problemas y yo tenía que demostrar todo varias veces, suena a cliché, pero así fue.”

Sin embargo, no todo han sido complicaciones. Durante su trayectoría profesional ha colaborado con mujeres y hombres que le han servido de gran inspiración y apoyo para escalar hasta la cima. Desde su madre hasta su hija, pasando por compañeras de profesión como Uschi Henkes, Coloma Fernández Armero y Sarah Okrent, entre otras. Sin olvidar a su querida agente Palmira de Dos Pasos. 

Las grandes decisiones “se toman” viendo el fútbol en casa del jefazo 

Agencias donde las decisiones se toman un domingo en casa del Director Creativo de turno viendo el fútbol. 

Por surrealista que parezca, Virginia afirma que esta ha sido alguna de las situaciones que le ha tocado vivir:

“Muchas veces, he estado en agencias donde las decisiones se tomaban los domingos viendo el fútbol en casa del Dire Creativo de turno y o ibas a ver el partidito o estabas fuera.” 

Convivencia de alter egos – Jefaza creativa por el día, Súper madre de noche, literal #noledalavida

Una maternidad real y sin tapujos, esta perspectiva ha sido la fuente de inspiración de las creaciones personales de la creativa. 

Sin duda una madre consciente de su connotación laboral, Virginia ha aprendido a aliar a sus alter egos “madre” y “curranta” para llegar al fin del día satisfecha y entera. 

No obstante, aprovecha el arte para plasmar esta denuncia social en obras para las masas. Su primer libro Motherland o su último cortometraje #Nomedalavida, candidato a la 36 edición de los Premios Goya, son ejemplos de este inconformismo hecho arte. 

Motherland

Su primer libro surgió por una mera razón de supervivencia. Asegura que fue la vía de escape mediante la cual contar lo que estaba sintiendo en su propia piel durante la metamorfosis de mujer a madre. 

«Quería arrojar esa visión de choque entre lo que pensaba que era la maternidad, y lo que realmente es”. 

#Nomedalavida

Jefaza creativa por el día, Súper madre de noche, una exigencia social que es difícil cuadrar para cualquier mujer, y que según Virginia, “no ve que pase lo mismo con los hombres”. 

 “La sociedad nos exige que seamos madres como si no tuviéramos carrera (una hipermaternidad sin precedentes) y que curremos como si no fuéramos madres (una competitividad feroz). Y, sinceramente, no veo que pase lo mismo con los hombres (aún).»

Esta desigualdad de expectativas lleva a la creativa a crear #Nomedalavida, un corto que trata sobre todo lo que tiene que llevar una madre a cuestas todos los días (techo de cristal, soledad, desigualdad, escasa corresponsabilidad en el hogar) esta vez en la piel de los hombres, dando lugar a una peli de humor. 

Pero más que gracioso, es preocupante. “Que sea hilarante verlos hablar del cambio de armarios o el disfraz de la función demuestra que queda camino amigas.”

Consejo para las creativas del mañana

“La creatividad no tiene género”, lema de la creativa que impulsa a cualquiera a perseguir sus sueños dentro de la profesión, aunque te choques de bruces contra la pared.

De los errores y noes se aprende, nos dice Virginia tras una trayectoria más que exitosa de más de 20 años, todo un ejemplo que ha hecho de tripas corazón para llegar al mejor sitio de todos: la satisfacción de ser tú misma. 

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